- Por jeannette.bain
- Publicado hace 2 años
Las bajas temperaturas del invierno se aproximan y no solo debemos sacar poco a poco nuestros abrigos, sino que vamos revisando nuestros sistemas de calefacción para asegurarnos que podemos hacer frente a este cambio de estación.
Y aunque los sistemas de calefacción nos recuerdan un aumento en la factura de nuestro consumo energético, te compartimos consejos claves para garantizar un ahorro a corto, mediano y largo plazo, manteniendo nuestro confort en invierno.
Ahorra ahora. Pequeñas acciones y cambios de hábitos.
Purgar radiadores una vez al año
¿Ya has purgado tus radiadores? Si la respuesta es no, esta es la señal que necesitabas para hacerlo, ya que los meses de otoño son ideales para purgar los equipos con el fin de que en el invierno funcionen correctamente.
Si no lo hacemos, lo que sucederá es que el radiador no calentará adecuadamente debido a la acumulación de aire, haciendo que la emisión de calor sea ineficiente. En consecuencia, el sistema de calefacción trabajará el doble para llegar a la temperatura, consumiendo más energía.
No coloques nada sobre los radiadores
Sabemos que en Pinterest podemos encontrar muchas ideas sobre cómo disimular los radiadores de casa. También comienza la costumbre de secar la ropa sobre ellos.
Sin embargo, durante la época de invierno te recomendamos no colocar nada delante de los radiadores que puedan obstaculizar la salida de calor: recuerda que en este tiempo nuestro confort sin consumir más energía es la prioridad.
Ventila las habitaciones sólo lo necesario
Ventilar nuestras casas es un hábito necesario y saludable, ya que debemos renovar el aire de los espacios encerrados y regular la humedad.
Durante el invierno te recomendamos ventilar durante 10 minutos diarios, preferiblemente durante la mañana que suele ser el momento más cálido del día. Este tiempo será más que suficiente para propiciar la renovación del aire en el hogar.
Baja las persianas durante la noche
Recuerda cerrar todas las ventanas durante la noche para conservar la temperatura de tu hogar.
Ahorra mañana. Acciones y pequeñas inversiones.
Programa tu calefacción
Si tienes encendida la calefacción durante el tiempo que no estás en tu casa, o pasa mucho tiempo apagada y la colocas a altas temperaturas para alcanzar la temperatura deseada rápidamente, te contamos que estás usando la energía de forma ineficiente y verás las secuelas en tus facturas.
Para que esto no te suceda, la solución es instalar termostatos de ambientes programables que te permitan programar la calefacción para que tenga un uso racional acorde a tu rutina.
A su vez, te recomendamos instalar repartidores de costes, válvulas con cabezal termostático y termostatos modulantes.
Te recomendamos mantener la temperatura de tu hogar a 19°.
Instala aislantes en las puertas y ventanas
No basta el sistema de calefacción en el hogar si dejamos que el calor se escape de nuestro hogar. Para evitarlo te recomendamos colocar aislantes en ventanas y puertas.
Coloca reflectores en los radiadores que estén en paredes en contacto con el exterior, o con zonas no climatizadas.
Los paneles reflectantes en los radiadores propician que el calor en la superficie no se difunda a la pared, sino que “rebote” y cambie su dirección hacia la habitación y no la pared que enlaza con el exterior.
Planifica y ahorra.
Por último, cuando pienses en renovar tu sistema de calefacción ten en cuenta que invertir en equipos más eficientes y amigables con el medio ambiente te supondrá un ahorro a largo plazo.
Los sistemas de calefacción tienen, además, una larga vida útil -que se incrementa con una mejor calidad de los materiales- por lo que tu inversión se amortizará con los ahorros en tu factura.
También existen otras acciones que puedes realizar y que complementan el uso de equipos más eficientes: aislamientos y rehabilitación de tu vivienda.