Los frigoríficos nos ayudan a mantener en buen estado los alimentos conservándolos en frío, mientras que los congeladores nos permiten conservarlos durante mayores periodos de tiempo. En el mercado podemos encontrar distintos tipos de congeladores, de dimensiones, consumos y prestaciones también variables.
Se pueden clasificar de la siguiente manera:
Congeladores verticales
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Disponen de varios cajones en el interior para almacenar los alimentos. Pueden formar un modelo Side by Side en combinación con un frigorífico. A igualdad de volumen ocupan menos espacio que un congelador horizontal.
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Congeladores horizontales (tipo arcón)
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Estos congeladores se abren por la parte superior. No están divididos interiormente como los modelos verticales. Ideales para congelar grandes cantidades de alimentos
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Debemos elegir el tipo de congelador en función del uso que le vayamos a dar y la localización en la que lo instalaremos: un congelador vertical es más práctico si va a estar instalado en la cocina, mientras que uno tipo arcón sería más indicado para otras localizaciones con mayor espacio.
Consejos para la adquisición
- No sustituir un congelador que funciona bien solo por el consumo energético. Teniendo en cuenta los costes de producción, transporte y reciclado del viejo congelador, el balance ecológico sería negativo. Sin embargo, si se sustituye un congelador que tiene más de 10 años por uno de clase A++ o A+++ el balance ecológico es positivo.
- Clase energética: Indica el grado de eficiencia energética del producto. El nuevo etiquetado energético, en vigor a partir del 1 de marzo, reescala las categorías energéticas, actualmente no vamos a encontrar congeladores de clase A y muy pocos de las clases superiores, dejando espacio a la innovación tecnológica del futuro. Por ello en eurotopten.es hemos seleccionado los mejores frigoríficos del mercado español, de clase D o superior del nuevo etiquetado energético.
- El número de estrellas de un congelador hace referencia a su capacidad de conservación y/o congelación (temperatura y nº de días que puede conservar los alimentos). Ten en cuenta que sólo los congeladores de más de tres estrellas tienen la capacidad de congelar los alimentos.
Nº estrellas
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Conserva
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Congela
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Temperatura
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Conservación de los alimentos
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*
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X
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Hasta -6ºC
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1-2 días
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**
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X
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Hasta -12ºC
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Hasta 3 días
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***
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X
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X
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Hasta -18ºC
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Hasta un mes
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****
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X
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X
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Hasta -24ºC
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3 o más meses
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Para mayor exactitud se recomienda consultar siempre los tiempos de conservación indicados por el fabricante.
Todos los congeladores presentes en Topten tienen la calificación de 4 estrellas.
- Elegir un congelador con la capacidad adecuada a nuestras necesidades; un aparato muy eficiente, pero demasiado grande nos hará malgastar energía, ya que será más difícil utilizarlo a carga completa. Aconsejamos seguir estas recomendaciones:
Nº de personas
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Capacidad aconsejada
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1-2
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Hasta 120 litros
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3-4
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Hasta 240 litros
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5 o más
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60 litros por cada
persona de más
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- Infórmate de si existen líneas de recogida y reciclado para tu viejo congelador cuando te decidas a comprar uno nuevo.
Consejos para la instalación
- Posiciona el congelador lejos de fuentes de calor, como pueden ser el horno o el lavavajillas; cuanto más elevada sea la temperatura del entorno más energía consumirá el aparato.
- Sepáralo de la pared. Es recomendable que la parte trasera del congelador esté, al menos, 3 cm separado de la pared. Esto favorecerá el intercambio de temperatura, mejorando el funcionamiento del congelador.
Consejos de utilización
- Regula el termostato de manera adecuada. La temperatura óptima para el congelador son-18 ºC. Temperaturas más frías, además de ser inútiles para conservar bien los alimentos, incrementan notablemente el consumo de energía: un 5% por cada grado de menos. En el caso de no tener indicador de temperatura, reducir al mínimo en invierno e intensidad media en verano. Entre tener un congelador al máximo y al mínimo hay una diferencia de entre 10 y 15 € por factura
- Antes de introducir un alimento que todavía está caliente, deja que se enfríe. Esto evitará que el congelador se ponga en funcionamiento para poder recuperar la temperatura que tenía antes de introducir el alimento caliente.
- Un congelador lleno consume menos que uno vacío. Esta recomendación se basa en que el aire mantiene mucho menos el frío que los sólidos. Si tenemos un congelador casi vacío, cada vez que abramos la puerta se perderá la mayoría del frío. Para mantenerlo, es recomendable introducir en el congelador hielo o botellas llenas de agua. Esto ayudará a mantener mucho mejor el frío dentro del congelador, y reducir la subida de temperatura cada vez que lo abrimos.
- Ábrelo lo menos posible, basta con unos pocos segundos para perder buena parte del frío acumulado. Para ello, ordena adecuadamente los alimentos en el interior.
- Evita que se forme hielo o escarcha: ya que actúan como aislantes y obligan a trabajar más al motor para mantener constante la temperatura, disparando el consumo de energía. Una capa de tan sólo 3 mm en el congelador incrementa el consumo un 30%.
Descongela una o dos veces al año el congelador para mantener el congelador en condiciones óptimas. Los aparatos NoFrost realizan esta operación de forma automática manteniendo la humedad en el interior del congelador bajo control para evitar la formación de hielo.
- Limpia el burlete de la puerta del congelador de vez en cuando y asegúrate que está en buen estado, y cierra correctamente.