Consejos para la adquisición
- Clase energética: recordemos que la clase B es la peor del mercado, por lo que recomendamos elegir modelos de clase A++. Un horno de clase A++ consume un 20% menos que un A.
- Es preferible elegir un horno con modalidad de ventilación. De este modo el calor se distribuye más homogéneamente en la cavidad, lo cual permite hornear varias bandejas a la vez y tener los mismos resultados a temperaturas más bajas.
- Nos orientamos hacia los modelos con la función de limpieza catalítica. Los hornos catalíticos tienen un revestimiento interior especial que cataliza las grasas y azúcares que se adhieren en el momento de la cocción. Al contrario que la pirolítica, no implica más consumo energético.
Consejos para la instalación
- Posiciona el horno lejos del frigorífico o el congelador, ya que las prestaciones de estos electrodomésticos cuando se encuentran cerca de fuentes de calor empeoran y consume más energía.
Consejos de utilización
El horno es uno de los electrodomésticos que más energía demandan por hora, así que se recomienda utilizar este equipo sólo si es necesario. Una alternativa eficiente sería el microondas. Este electrodoméstico, a pesar de que demanda gran potencia, es una opción muy eficiente debido al poco tiempo que necesita para calentar los alimentos. Sin embargo, si decides seguir utilizando el horno sigue los siguientes consejos para mejorar la eficiencia en su utilización:
- Procura aprovechar al máximo la capacidad del horno y cocina de una vez el mayor número de alimentos.
- En general, el precalentamiento no es necesario, aunque se aconseja en muchas recetas.
- Utiliza la función de ventilación, así se distribuye mejor el calor y se garantiza una cocción óptima de los alimentos a temperaturas 20-30ºC inferiores respecto a la función estática o estándar. Además, al distribuir mejor el calor permite cocer más alimentos al mismo tiempo.
- Cuando acabamos de usar el horno, este todavía mantiene una temperatura altísima. Ese calor que desprende apagado, es calor que nos ha costado dinero generar, y que estamos malgastando. Apaga el horno 5 min antes de que esté terminada la cocción. La temperatura que mantiene apagado será suficiente para terminar de cocinarlo, y nos permitirá aprovechar ese calor que en otra situación, perderíamos.
- No abras innecesariamente el horno. Cada vez que lo haga estará perdiendo un mínimo del 20% de la energía acumulada en su interior.
- Para la limpieza no utilices la modalidad pirolítica, ya que consume una gran cantidad de energía (3kW). Si tu horno no es catálico, puedes utilizar la limpieza hidrolítica que es mucho más eficiente y ecológica.
- Limpia el burlete de la puerta del horno de vez en cuando y asegúrate que está en buen estado, y cierra correctamente.